1.- Una de la personas es invitada para ser el Cliente, aquel que tiene un problema, un deseo, un sueño por realizar. Durante la dramatización, hecha ante un Oráculo, los Sacerdotes, Minerva y Circe, colaboran en el proceso de generación de ideas, en el que también participan las Sirenas. Después, el Rey Midas y Minerva contribuyen en la selección de la mejor idea. Finalmente, Hércules ayuda al Cliente a preparar un plan de aceptación para la idea elegida.

2.-  Después de la dramatización, los participantes, con la orientación del facilitador, debaten las metáforas empleadas, hasta que todos comprenden el proceso creativo y cómo pueden aplicarlo en cualquier ámbito de la organización o de la vida personal.